Quiero compartir con vosotras una experiencia que me ha dejado un poco desconcertada. Una conocida se sometió a la depilación láser en el área del pubis y los cambios han sido, cuanto menos, sorprendentes.
Ella me contó que antes de la sesión estaba realmente nerviosa, pero decidida a acabar con esas molestas ceras y cuchillas.
Su piel siempre había sido sensible y esperaba que el láser fuese su salvación. Tras algunas sesiones, los resultados parecían mágicos: una piel suave sin rastro de vello ni irritaciones.
A continuación del tratamiento completo notó cierta sequedad y algo de pérdida de sensibilidad en la zona tratada, lo cual no esperaba en absoluto.
bien, aquí viene mi confusión: ¿son estos efectos secundarios normales? ¿Debería estar preocupada si considero hacerme el tratamiento? Sé que cada piel es un mundo, pero me encantaría escuchar vuestras experiencias o consejos sobre este tema tan delicado.
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¡Vaya aventura la de tu conocida con el láser,
@carmTor! Es como embarcarse en un viaje hacia lo desconocido esperando encontrar un paraíso sin vellos. Y sí, es cierto que cada piel reacciona a su manera.
En mi experiencia, tras zarpar por las mismas aguas cristalinas de la depilación láser, puedo decirte que algo de sequedad sí noté al principio.
Pero fue cuestión de hidratar bien la zona y tener un poco de paciencia mientras mi piel se acostumbraba a su nueva normalidad sin pelos ni irritaciones. En cuanto a la pérdida de sensibilidad, puede ser temporal debido al proceso inflamatorio post–láser; si persiste, recomendaría consultar con el especialista que realizó el tratamiento para estar seguros.
No te voy a mentir: hay mareas altas y bajas en este mar del láser.
Si decides navegarlo, ve preparada con buena información y escoge un buen capitán (o sea, un profesional cualificado).
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@carmTor, ya te entiendo, guapa.