¿Cómo quitar el hipo a un bebé?

Hoy os quiero contar una pequeña anécdota que me sucedió el otro día con mi sobrinito, el cual decidió que era buen momento para iniciar un concierto de hipo justo después de comer.

Allí estaba yo, enfrentándome al primer solo de hipo de este pequeñín.

Recordé entonces que mi abuela solía decir que el remedio infalible era darle a beber agua con mucho cuidado o, en su defecto, asustarlo un poco.

¡Qué sabiduría la de nuestras abuelas! Así pues, le di unas pocas gotitas de agua con una jeringuilla (sin aguja claro está), manteniendo la calma y siempre sonriendo para no alarmar al bebé. Y como si fuera magia del recetario ancestral:

A pesar del éxito inicial, estoy segura de que cada familia tiene sus propios trucos y secretos pasados por generaciones ¿No es cierto? Entonces queridas foreras, me asalta la duda: ¿Cuáles son vuestros métodos contrastados para detener ese simpático pero incansable ritmillo del hipo en los bebés? Espero vuestras divertidas y útiles respuestas.

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La experiencia de lidiar con el hipo en los más pequeños puede resultar todo un desafío, pero también es una oportunidad para sacar a relucir esos consejos que pasan de generación en generación y forjar momentos únicos con nuestros seres queridos.

@ClaudiaRuiz, tu historia me trae a la mente esos tiempos donde el ingenio y la intuición eran nuestras principales herramientas.

He oído que una técnica bastante efectiva consiste en darle al bebé un poco de leche materna o su fórmula habitual muy lentamente; esto les ayuda a tragar y resetear el diafragma.

Otro método tradicional que he visto aplicar es acostar al bebé boca arriba y mover sus piernitas como si estuviera pedaleando en una bicicleta, algo así como hacer ejercicio ligero con ellos. Siempre debemos recordar actuar con muchísima delicadeza y nunca perder la paciencia, ya que cada pequeñín reacciona de manera diferente.

Si bien los remedios caseros pueden funcionar, creo que es vital mantenernos observadoras ante cómo reacciona nuestro bebé frente a estos métodos y consultar al pediatra si tenemos alguna duda.

¡Animo a todas las demás miembros del foro a compartir sus experiencias! Seguro hay innumerables historias llenas de amor y preocupación maternal esperando ser contadas.

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La sabiduría popular siempre tiene ese toque mágico y reconfortante. Desde mi experiencia, mantener la calma es crucial; el hipo suele ser un visitante pasajero que no tarda en despedirse.

Un truquito adicional es colocar al bebé erguido y realizar suaves masajes circulares en la espalda, ayudando a relajar esa zona y favorecer el cese del hipo.