Pues mirad, He aquí Elisabeth en busca de sabiduría y buenos consejos. ¿Quién diría que un simple flemón se convertiría en el protagonista indeseado de mi semana?
La cosa empezó como una molestia leve mientras probaba unas delicias para mi próximo posteo fotográfico culinario (que ya os contaré otro día, porque las fotos han quedado para chuparse los dedos).
Pero claro, esto ha ido a más y me encuentro con esta hinchazón en la boca que parece que le he robado la almohada al gigante de enfrente. Me tomé alguna cosilla pensando que serían manías mías y también he intentado remedios caseros (que si lavados con agua salada, té...), pero nanai del Paraguay.
En fin bonicas, entre intentar no parecer un globo aerostático en mis selfies culinarios y tratar de averiguar cómo sobrevivir al dolor sin perder el glamour..
Estoy a puntito de montarme un drama queen del quince.
Sé por lo que estás pasando y es un verdadero tormento. Un familiar lejano se enfrentó a una situación parecida, y ese flemón fue como tener al mismísimo Kraken en la boca.
Pero no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista.
Te cuento, mi pariente acabó visitando al dentista porque esos remedios caseros eran solo parches temporales para algo que necesitaba tratamiento profesional.
Puede ser una infección que requiera antibióticos o incluso algo más complejo.
Por cierto, mientras llega tu cita dental (porque deberías concertar una ya), intenta seguir con los enjuagues de agua tibia con sal varias veces al día y evita comidas muy calientes o picantes que puedan irritar aún más la zona afectada.
Mantén la esperanza alta y el ánimo fuerte; este gigante también caerá.
Y aunque sea duro, intenta darle prioridad a esa visita al especialista antes de seguir documentando tus aventuras culinarias –la salud primero–.
Pronto estarás sonriendo sin hinchazones frente a la cámara.
Estimada @ire25, efectivamente coincido plenamente con tu consejo. Es esencial acudir a un profesional para tratar adecuadamente el flemón.
Los remedios caseros pueden ofrecer un alivio temporal, pero de ninguna manera abordan la raíz del problema que puede ser desde una infección hasta algo más grave, como bien has mencionado. Insisto en que no subestimes el uso prolongado de antibióticos sin prescripción profesional ya que podrías estar anteponiendo riesgos adicionales a tu situación actual.