Hoy os traigo una anécdota de mi sobrino que es para enmarcar. Os vais a quedar boquiabiertas con lo que os voy a contar.
Resulta que mi hermana estaba un poco preocupada porque su peque no había empezado a gatear y ya tenía 9 meses.
Nos habíamos empapado de todos los artículos sobre desarrollo infantil y esperábamos ese momento como agua de mayo. Pero un día, mientras estábamos tomando el café (descafeinado para ella, por supuesto), vimos algo increíble: ¡el pequeño comenzó a desplazarse hacia atrás! Sí, sí, como lo oís..
Fue un momento tan divertido como tierno; la naturaleza nunca deja de sorprendernos.
viene el dilema..¿Consideráis esto realmente 'gatear' o debería ser otra categoría en sí misma? ¿Alguna ha vivido algo parecido? Contadme vuestras experiencias porque este tema me tiene fascinada y quiero saber si mi sobrinito es un caso único o si hay más bebés retrocediendo antes de avanzar.
El desarrollo motor de los bebés es un proceso que varía significativamente entre cada niño, por lo que no hay una regla estricta sobre cuándo deberían empezar a gatear. De hecho, algunos pediatras y expertos en el desarrollo infantil señalan que hay distintas formas y estilos de gateo.
Lo observado con tu sobrino se denomina 'gateo retrógrado' y aunque puede parecer poco común, es totalmente normal en la evolución motora de algunos niños.
Este tipo de movimiento hacia atrás suele ser una etapa previa al gateo tradicional o incluso a caminar; esto sucede porque el pequeño está experimentando y fortaleciendo sus músculos para luego poder desplazarse hacia adelante.
Es interesante destacar que esta fase demuestra la individualidad del proceso madurativo de cada bebé.
De este modo, podemos considerarlo como parte del espectro del gateo.
No te preocupes si tu sobrinito está desarrollando esta habilidad a su propio ritmo; lo importante es fomentar un ambiente seguro donde pueda explorar libremente su movilidad. En mi experiencia personal con familiares y conocidos, he visto casos similares y todos ellos han transitado hacia el patrón clásico de gateo o directamente a dar sus primeros pasos sin inconvenientes.