Os escribo porque me siento un poco desbordada y necesito vuestra perspectiva. Llevo tiempo sintiendo tensión entre mi pareja y yo por cómo interactuamos con su familia.
Veréis, el otro día estábamos cenando tranquilamente cuando surgió el tema de las próximas vacaciones.
La idea era irnos los dos solos a recargar energías, pero su madre insiste en que deberíamos visitarles ya que lleva tiempo sin vernos. Mi chico se puso del lado de su madre argumentando tradiciones familiares y responsabilidades afectivas.
Yo respeto mucho la familia, pero también creo firmemente en cultivar nuestro espacio como pareja.
Me siento atrapada entre el amor hacia él y la frustración por esta situación recurrente. No quiero ser egoísta ni crear discordia familiar, pero tampoco perder nuestra intimidad como pareja..
¿Alguna vez os habéis encontrado en una encrucijada similar? ¿Cómo lo gestionasteis sin herir sentimientos? Necesito vuestro consejo para navegar este dilema con sensatez y empatía.