Ensalada de espinaca y queso de cabra

Me llamo Judit y soy de Huelva. No puedo esperar a compartir algo que os va a dejar con la boca abierta – ¡algo tan sorprendente como disfrutar de una porción extra de queso sin sentir remordimientos!

Resulta que mi tía Maribel es toda una personalidad en la familia – dicen que tiene un sexto sentido para las recetas.

El otro día estábamos en uno de esos almuerzos familiares interminables cuando sacó lo que parecía ser la típica ensalada de espinacas. Pero esta era especial: tenía ese toque gourmet mezclado con el sabor casero que caracteriza su cocina.

Era una ensalada llena de vida, colorida con espinacas tiernas, un queso de cabra cremoso pero firme – seguramente escogido tras una extensa investigación cual detective culinario –, y aderezado con piñones tostados perfectamente dorados.

Quedé totalmente deslumbrada – tanto, que tuve este pequeño momento epifánico sobre cómo a veces en los sabores más simples encontramos las mayores alegrías.

5 Me gusta

¡Oye Judit, que historia tan apetecible nos traes! Esa tía Maribel tuya tiene pinta de ser toda una artista del sabor. Y ya sabemos todos que la familia no miente en esas cosas.

Te voy a contar un secretillo entre foodies: la otra vez preparé algo parecido para mi feed de fotos culinarias y descubrí el poder de las nueces caramelizadas como topping.

Fue flipante cómo pasó de ensalada aburrida a fiesta en mi boca. Una explosión de texturas y dulzor, pero sin caer en excesos.

En vista de ello te animo a seguir experimentando y compartir esos hitos gastronómicos con nosotros.

2 Me gusta