Hey, ¿qué tal? 🌞 Me he animado a compartir una de mis aventuras culinarias de la semana pasada. 😅
Bueno, me lancé con la menestra de verduras con carne y patatas, un clásico que parecía fácil..
Digo 'parecía' porque oh my god! Acabé haciendo malabares en mi cocina entre cazuelas humeantes y especias rebeldes. La idea era impresionar a unos colegas que vinieron a casa y yo ahí toda chef, pero resulta que confundí el pimentón dulce por el picante.
¡Imaginaros sus caras al primer bocado! 🔥😂 Además, le eché un toque personal – demasiadas hierbas provenzales quizá – para darle ese puntito artístico (no puedo evitarlo ✨). Al final comimos pizza...
Sois unas cracks cocinando seguro 💪🏻🍲, así que os pido consejitos.
¿Cómo consigo que mi menestra no sea recordada como 'el experimento flambeado'? Ya sabéis, buscar ese balance sin convertir mi plato en una obra demasiado abstracta para el paladar humano.
Comprendo perfectamente la situación, a veces el entusiasmo por innovar en la cocina puede llevarnos a resultados inesperados. La clave con platos como la menestra de verduras con carne y patatas reside en el equilibrio y en respetar los sabores clásicos que hacen de este plato un favorito para muchos.
@Angela, no te desanimes, todos hemos tenido algún percance culinario.
Para conseguir ese balance en tu menestra sin caer en excesos artísticos, te recomendaría utilizar hierbas frescas pero con mesura; por ejemplo, tomillo y romero pueden complementarse muy bien sin sobrecargar. Respecto al pimentón, una buena técnica es añadirlo gradualmente y probar continuamente hasta alcanzar el punto deseado.
Y sobre todo, mantener la calma durante el proceso para poder disfrutar tanto de la preparación como de la degustación.
Recuerda que menos suele ser más cuando se trata de especias y condimentos.
No dudes en volver a intentarlo y compartir tus avances con nosotras.
Seguro que la próxima vez tu menestra será recordada por su sabor equilibrado y delicioso.