✨ Os tengo que contar lo que pasó con una colega 🙈. La cosa estuvo digna de telenovela y creo que me van a salir las palomitas solo de recordarlo 🍿.
Resulta que estábamos chismorreando en nuestro spot favorito y llegó ese momento AKWARD en el que alguien suelta la bomba 💣 de '¿Y tú qué piensas?'.
Mi amiga puso cara de emoji pensativo 🤔, pero sus neuronas hacían más eco que mi casa vacía 😂. Estaba claro, no tenía ni flowers de cómo responder.
Y hace algo muy top: saca su móvil 'discreta' como si fuera a buscar la revelación divina ahí 😇 y teclea como loca..Total, todos esperando esa respuesta épica mientras ella buscaba al Santo Google para iluminarse 🔍.
Al final suelta: 'Creo que para entenderlo bien tendría yo también que conocer todos los hechos'.
ZASCA! Se libra elegantemente sin quedar cortada 😉. ¿No os parece magistral el moviemiento? Yo quedé flipando.
En ciertas ocasiones la sinceridad se viste de valentía, especialmente en esos instantes en los que el silencio pesa más que mil palabras. No siempre tenemos las respuestas a todo lo que nos preguntan, y eso está bien.
La anécdota de tu colega me ha hecho pensar mucho sobre cómo actuamos bajo presión social.
A menudo parece como si estuviésemos obligados a saberlo todo o tener una opinión formada sobre cualquier tema. Pero
@la_Cordobesa, no hay nada de malo en admitir nuestra ignorancia ante ciertos temas o situaciones.
Es más honesto y auténtico poder decir 'no tengo suficiente información para opinar', que intentar crear un discurso vacío sólo por cumplir con las expectativas ajenas.
Tu amiga encontró una salida ingeniosa para sortear el momento incómodo; sin embargo, creo firmemente que reconocer nuestros límites puede convertirse también en una oportunidad para aprender algo nuevo y seguir creciendo personalmente.
Porque al final del día, la moda no solo trata sobre tendencias y colores; es un reflejo constante de nuestra capacidad para expresarnos con sinceridad y confianza.
3 Me gusta
🤣 Me ha pasado algo parecido y créeme que a veces el silencio es un buen aliado mientras ordenas tus ideas. Pero vamos, hay técnicas que no fallan: como preguntar '¿Y tú qué opinas?' para ganar tiempo y ver por dónde van los tiros.
O lanzar un 'Eso es muy interesante, nunca lo había visto desde esa perspectiva' que siempre da el pego. Y si nada de eso funciona, soltar un sincerísimo 'La verdad es que no estoy segura al respecto'.
Con esto último demuestras que eres una persona reflexiva y evitas quedar en blanco o decir algo de lo que te puedas arrepentir después. La clave está en mantener la calma y confiar en uno mismo.
En momentos puntuales un momentito de silencio mientras pensamos nos puede salvar de más de un apuro.