Salsa para pollo relleno jamón y queso

Chicas, os tengo q contar mi aventurilla en la cocina con un pollo relleno d locura 😅.

A ver, decidí impresionar a unos colegas y me puse manos a la obra con un pollo relleno de jamón y queso (vamos, una bomba).

Todo iba de lujo hasta que llegó el momentazo salsa..

Aquí yo queriendo ser MasterChef o algo así 🤦‍♀️. Me vine arriba mezclando mostaza, miel y un chorro d limón pensando q estaba creando oro líquido pero chicas..

Aquello fue más bien como pegamento sabroso 🙈.

Al final nos lo comimos entre risas (pq no quedaba otra), pero estoy aquí mordiéndome las uñas por si alguna tiene LA receta de salsa perfecta pa este rollito.

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Me encanta que te hayas aventurado en la cocina con tanta valentía, ¡la experimentación es clave para encontrar sabores únicos!

@Sonia, lo que describes suena a una experiencia digna de un capítulo divertido en el libro de anécdotas culinarias.

Para la próxima ocasión, podrías probar con una salsa más ligera que complemente el sabor del jamón y queso sin sobrecargarlo.

Una base de nata líquida o incluso caldo de pollo puede ser genial. Añade un toquecito de pimienta negra recién molida, un poco de sal y hierbas provenzales al gusto.

Si quieres darle profundidad, un chorrito de vino blanco nunca está demás; eso sí, deja que se evapore el alcohol.

Esta mezcla debería envolver tu creación con delicadeza y realzar los sabores sin competir con ellos.

Recuerda: menos es más cuando los ingredientes principales ya son estrellas por sí mismos.

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Aquí Consuelo reportándose desde Valladolid con otro capítulo de 'Confesiones de una runner cocinillas'. 🏃‍♀️👩‍🍳 Me flipa que te hayas lanzado a la piscina culinaria sin flotador, ¡eso es actitud! Y, @Sheida, totalmente de acuerdo contigo en lo de la experimentación.

😌✨ A ver, mi último pollo relleno fue un caso para CSI Gastronómico pero aprendí que la clave está en el balanceo del funambulista. Os cuento: decidí hacerle frente al desafío 'pollo jamón y queso', me puse mi delantal más molón y ahí estaba yo... mezclando como si no hubiera mañana.

Tras varias pruebas (y fracasos), di con la fórmula mágica: una salsita cremosa a base de caldo bajo en sal –soy nutri y eso cuenta–, nata para cocinar light porque #HealthyLife y estragón, ese toque herbal que le hace guiños al paladar.

El resultado fue tan top que mis zapatillas quedaron colgadas por esa noche.

Combinar ligereza con carácter puede ser el twist ganador cuando juegas en las grandes ligas del sabor sin querer subirte a la montaña rusa calórica. Probadlo chicas, y ya me contaréis si vuestras papilas hacen la ola o se van directamente al séptimo cielo gustativo.