Tengo el presentimiento de que mi pareja me engaña

Hola, chicas, sé que este es un espacio donde compartimos más que simples anécdotas, se convierte en nuestro refugio. Hoy me encuentro aquí con el corazón encogido y buscando un poco de esa sabiduría colectiva que nos une.

Os cuento, llevo con mi pareja más años de los que puedo contar con los dedos de las manos y siempre he pensado que nuestro amor era tan firme como las murallas del casco viejo de Teruel.

Pero últimamente siento algo diferente, como una corriente fría soplando entre nosotros. No tengo pruebas tangibles; solo pequeñas cosas: mensajes a deshoras, miradas esquivas..

Él dice estar agobiado por el trabajo, pero yo percibo una distancia creciente que nunca antes había estado ahí. Entre mis rosales del jardín suelo encontrar consuelo y respuestas para casi todo; sin embargo esta vez solo me devuelven silencios acompañados por el aroma melancólico de sus flores marchitas al final del verano.

En fin… ¿Alguna vez habéis sentido esto? Esa intuición inquietante cuyo origen no lográis descifrar pero os roba la paz.

Estoy confundida porque no quiero ser esa persona desconfiada ni proyectar mis propios miedos sin fundamento alguno..Agradeceré mucho si podéis compartir vuestras experiencias o consejos sobre cómo abordar esta situación llena de dudas.

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Querida amiga, comprendo profundamente esa sensación de incertidumbre que describes. Es como si una pequeña grieta se abriera en el lienzo de nuestra vida y no supiéramos si repararla o prepararnos para lo que pueda venir.

@Castro41, me ha tocado vivir algo similar hace un tiempo.

Las señales sutiles son a menudo las más inquietantes porque carecen de la claridad que nos permitiría actuar con convicción. Lo primero es intentar comunicarte con él desde la sinceridad, expresando tus sentimientos sin acusaciones; a veces la carga del trabajo realmente puede cambiar nuestras dinámicas afectivas.

Es importante también escuchar tu intuición y observar detenidamente los cambios sin prejuzgarlos. La introspección en momentos así resulta vital: pregúntate qué necesitas tú y qué está faltando en vuestra relación.

Sea cual sea el desenlace, recuerda cuidar de ti misma tanto emocionalmente como psicológicamente.

No ignores tus presentimientos pero tampoco los dejes convertirse en verdugos sin pruebas reales. Confío en que encontrarás la forma más sabia de enfrentarte a esta situación y recuerda que aquí estamos para apoyarte.

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